LA PLAZA DE LAS AULAS

Ultimo Capítulo EL RAMO DE LA NOVIA

A pesar de su estado Marieta quiso que su Padre fuese el Padrino de su boda, la verdad es que D. Senén había mejorado espectacularmente aunque ello no le permitiera ni prescindir de la silla de ruedas ni poder hablar, pero sí ser bastante consciente de lo que acontecía a su alrededor, D. Senén sabía que Marieta se casaba, que era feliz y que él era el Padrino.

Los novios, en principio, querían casarse en el Ermitorio de Nuestra Señora de Lidón, la Patrona (¿ y por que no Matrona?) de Castellón pero como queda lejos de la ciudad decidieron unirse en la Iglesia de Santa Maria, a unos 400 metros de casa de Marieta, de este modo D. Senén podría acudir en su silla de ruedas empujado por Trini.

El Banquete se celebraría en el Casino, a escasos doscientos metros de la Iglesia.

Llegó el día, la ceremonia se celebró con gran solemnidad y al finalizar y después de los consabidos !Vivan los Novios! y el lanzamiento del símbolo de la fertilidad, el arroz, a los novios les esperaba uno de los dos Taxi que había en Castellón.

De allí se dirigieron, nadie lo sabía, al cementerio; Marieta queria que su Madre pudiera compartir su felicidad.

Una vez delante del nicho donde reposaban sus restos Marieta le pidió a Alberto que las dejara un momento solas; Marieta se arrodilló frente a su Madre, lloró, lloró y lloró...estuvo hablando un buen rato con ella, le dijo que era feliz, que todos estaban bien y que echaba mucho de menos su presencia aunque en su recuerdo estaba siempre junto a ella...permaneció unos minutos en silencio...lentamente se levantó y depositó su precioso ramo de flores de azahar en la repisa de su nicho...se besó la mano derecha y le trasladó el beso.

!Hasta luego Mamá!

Se había hecho tarde, el taxista esperaba en la entrada...subieron al coche y en cinco minutos estaban en la puerta del Casino.

Al llegar D. Senén les esperaba, tomó la mano de su hija y balbució...

"Ya sé, hija"


FIN